Desde la antigüedad se ha buscado que el paso del tiempo no deteriore nuestra imagen y para ello se siguen investigando nuevas técnicas y sustancias que permitan mantener una piel joven durante más tiempo.
En CDC realizamos tratamientos cosméticos y quirúrgicos para preservar la piel y prevenir, además de paliar, el fotoenvejeciemiento. Existen tratamientos dermatológicos no agresivos que consiguen unificar el tono de la piel y devolver su esplendor.
*Peelings químicos superficiales.
Para exfoliar la piel y aportar luminosidad.
*Peelings medios.
Para atenuar arruguitas y principalmente para tratar la piel manchada tras prolongados baños de sol, embarazos, envejecimiento, queratosis seborreicas, etc.
*Peeling profundo.
Más agresivo que los anteriores, consigue una renovación total de la piel, eliminando arrugas tanto superficiales como profundas.